¿Quién de vosotros, teniendo un siervo que ara o apacienta ganado, al volver él del campo, luego le dice: Pasa, siéntate a la mesa? ¿No le dice más bien: Prepárame la cena, cíñete, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después de esto, come y bebe tú? ¿Acaso da gracias al siervo porque hizo lo que se le había mandado? Pienso que no. Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.
LUCAS 17:7-10
Ciertamente Dios nos ha bendecido con hacernos sus hijos por medio de la Confesión de Fe y del Bautismo y a través del sacrificio de Jesucristo, quien derramó su sangre para limpiarnos de nuestros pecados y librarnos de la condenación eterna, si le creemos y Obedecemos a todos sus Mandamientos.
Pero muchas veces olvidamos que además de ser sus hijos somos sus siervos y no nos comportamos como tales. Demasiado Bueno es nuestro Padre Celestial, quien nos ama con un Amor tan grande, que resulta inentendible para el hombre carnal, quien nos trata como a hijos y no como a siervos; pero no debemos olvidar que el llamamiento a su servicio es parte importante que debemos cumplir con fidelidad y Amor.
Como dicen estos versículos, todo siervo de esta tierra recibe órdenes que debe cumplir, sin ninguna explicación y sin ninguna recompensa especial por ello, sin siquiera un gracias.
La bendición real de un siervo de esta tierra esta en cumplir fielmente y diligentemente con lo que se le ha mandado hacer, esa es su satisfacción. Así mis amados hermanos, nosotros nos debemos gozar si logramos cumplir con todo lo que nuestro Padre Celestial nos envíe, sería algo maravilloso poder un día pronunciar esta frase: "Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, eso hicimos"; sería una gran bendición poder acabar la carrera en esta tierra, sabiendo que hemos cumplido con todo lo que se nos ha encomendado.
Iglesia amada de Jesucristo no olvidemos esta parte de nuestra vida espiritual que es sumamente importante; si bien somos hijos, jamás olvidemos que también somos siervos, y que no debemos perder el espíritu de Obediencia Absoluta, de Humildad, de Amor, de Entrega incondicional que debe habitar en todo buen siervo de Jesucristo.
No olvide, Jesucristo es Hijo, pero también fue Siervo en esta tierra, y recuerde con cuan grande Amor obedeció a su Padre entregando aún su cuerpo al sacrificio, demostrando así no solo que era incondicional a su Padre, sino también el gran Amor con que nos amó a todos nosotros, derramando su sangre para salvar a sus ovejas que estaban perdidas, y aunque era el Señor de todos, se comportó como Siervo de todos sirviendo con humildad hasta dar su vida por Amor a todos nosotros.
Amada Iglesia este es el ejemplo que nosotros debemos seguir, ser siervos de Jesucristo es estar revestidos con vestiduras de Amor, de Humildad, de Obediencia, despojándonos de toda soberbia, orgullo, egoísmo y vanagloria.
NO OLVIDEMOS, IGLESIA DE JESUCRISTO, SOMOS HIJOS Y SIERVOS DE DIOS, VIVAMOS Y COMPORTEMOS COMO TALES, SIGUIENDO EL EJEMPLO QUE NOS DEJÓ NUESTRO SEÑOR Y SALVADOR. DIOS LOS BENDIGA.
"EL QUE TENGA OÍDOS PARA OÍR QUE OIGA"
Si quieres ser Hijo de Dios es necesario hacer la siguiente confesión de FE (Romanos 10:9)
“Señor Jesucristo te recibo como único Señor y Salvador de mi vida; perdona mis pecados y ayúdame a seguirte todos los días de mi vida junto con mi familia”.
Si ya lo hiciste, te bendecimos y bienvenido a la familia de Dios. Contáctanos y te diremos que hacer a continuación.
MINISTROS PASTORES YOZZIA
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Favor de dejar sus comentarios para edificación de la iglesia de Cristo